Él

By 23:31 , , ,

Una nOchE él

le pidió en sueños

que lo amara.

Pero ella, cAllaDa,

siguió caminando.

AiRadA.

DeSpaCio.

Nunca le confesaría,

(ni en sueños)

el dolor de su coRazóN.

Ana Galindo

[IluStrAción de RaY CaEsar]


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1 comentarios

  1. Hermosa historia. A veces son tan fuertes los latidos que estos se tornan en palabras y con ellas se construyen pequeños reales, o imaginarios. Felicidades

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