La EscaLera Sin FiN

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Fue un día duro para Susana, ya que había tenido que estudiar para los exámenes del día siguiente. Susana era una chica de pelo moreno como el otoño y unos ojos grandes y grises como la noche. Siempre vestía con ropa muy simple y coqueta, ya que le hacían juego con sus rizos grandes y marcados.

Cayó en seco sobre la cama, porque estaba cansada y agotada de tanto estudiar, ya que quería sacar buena nota. En ese mismo momento su madre abrió la puerta, la arropó y le deseo buenas noches. Antes de irse, la madre le susurró al oído:

-Espero que tanto esfuerzo merezca la pena y que saques buena nota. Y, ¡que tengas felices sueños !

Como siempre, a Susana le ayudaban las palabras reconfortantes de su madre, a la que nunca le faltaban ese tipo de ánimo.

Susana se acomodó entre sus mullidas sábanas y empezó a soñar...

Sonó el despertador y la chica, sin pensarlo ni una vez, se levantó y fue directamente al armario para elegir su atuendo para ir al colegio. Se puso un vestido precioso, era totalmente rosa pero con un lazo en la cintura . Después de vestirse y ponerse unos pendientes, corrió hacia el baño, se limpió los dientes y se cepilló el pelo. ¡Estaba preciosa !

Desayunó en la cocina como todos los días y salió corriendo por la calle para no llegar tarde al colegio. A lo lejos avistó una escalera gigante que se perdía entre las nubes. Como Susana era muy curiosa, y todavía quedaban diez minutos para empezar la clase, corrió hacia la extraña escalera .

De cerca la escalera parecía aún mayor y la pequeña se asustó. No sabía si subir o ir al colegio para hacer el examen para el cual había estudiado tanto.

Decidió subir por la escalera porque ya le comía el gusanillo de la curiosidad por dentro. Subía, subía y subía, pero nunca terminaban los escalones. Hasta que una chica que se parecía muchísimo a ella la paró y le dijo con mucha paciencia :
-Hola Susana.
-Hola pero, ¿como sabes tú mí nombre?-Eso ahora no importa, lo que importa eres tú, y ya sabes que lo estas haciendo mal.-Bueno, si. Pero es que ….....-¡Es que nada !, tienes que ir a ese examen y enseñar a toda tu clase que has estudiado y te has esforzado mucho.
Y sin decir nada más, la chica que tan rara le pareció a la pequeña Susana, le pegó dos patadas en el culo dando dos volteretas en la escalera. Se levantó y recapacitó las cosas que le había dicho aquella chica. Así que decidió hacerle caso y prosiguió su camino, pero en vez de subir hacia arriba, sería bajando hacia abajo.

Aquella escalera le parecía cada vez más larga, ya que el suelo se veía aún más lejos. Y la pobre niña estaba cansada, porque llevaba toda la mañana andando por aquella escalera ¡y ya era la hora de comer !

Después de sentarse y comerse la merienda de la mochila decidió dormir un rato pero, es que ya no aguanta las ganas de llorar. Y lloró, lloró y no paraba de llorar hasta que escuchó a su madre que le decía :

-¿Qué te pasa Susana? ¿Estás bien?
Y de repente, en un abrir y cerrar de ojos, la chica se encontró en su cama y con su madre al lado suya. La niña empezó a llorar en los brazos de su madre, quien la cogía gustosamente y le recordaba su examen.

La chica no dudó, y mientras se alistaba para ir al colegio, le contaba el sueño que había tenido en aquella mágica noche.

Al final dela mañana, a la hora de comer, la chica vino corriendo por la casa, hasta su madre, para contarle la maravillosa noticia : ¡¡¡ Había sacado un sobresaliente en el examen !!!


Paula Jiménez -11 años-

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2 comentarios

  1. En nuestro blog de clase están todas las propuestas de trabajo para estas vacaciones, y la relación de textos publicados

    http://yaestamosenquintob.blogspot.com/2010/06/ejercicios-de-escritura-para-las.html

    ¡Buen trabajo chic@s! La maestra, Ana

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